CUIDADOS DE LOS ALHELÍES
Son reconocibles por su perfume, por su porte pequeño, por su resistencia y por su colorido. Los alhelíes pueblan en esta época del año balcones y terrazas de todo el país, llevando un retazo de primavera a tus espacios de exterior. Si quieres que permanezcan lozanos y bonitos, toma nota de nuestros cuidados de los alhelíes.
Siguiendo con nuestra serie de artículos sobre cuidados de las plantas y las flores, hoy te hablamos de una de las más comunes en nuestros balcones durante la primavera y el verano: los alhelíes.
Su aspecto rústico nos recuerda al campo y su colorido contrasta con otras plantas de temporada de tonos más suaves, por lo que nos viene muy bien para crear composiciones cromáticas equilibradas. Toma nota de los cuidados de los alhelíes, para que siempre luzcan radiantes en tus macetas.
¿Qué debes saber sobre los alhelíes?
- La especie de alhelí más conocida es la Erysimum chieri. Es una especie que se caracteriza por desarrollar uno o más tallos que pueden alcanzar de 15 a 80 centímetros, con hojas de hasta 20 centímetros de largo.
- Los alhelíes son plantas perennes y bianuales. Con los cuidados adecuadas, te acompañarán por mucho tiempo alegrando tu terraza o tu jardín.
- Los alhelíes florecen dos veces al mes desde finales del invierno hasta mediados de verano, por lo que se trata de una planta muy duradera para tus balcones.
- También hay especies de alhelíes que florecen en otoño e invierno, de manera que, si las escoges bien, puedes tener alhelíes en el balcón durante prácticamente todo el año. Si no sabes qué especies necesitas, en tu centro de jardinería te damos la información que precises al respecto.
- El sur de Europa y Asia forman el hábitat natural de los alhelíes, que se reparten por zonas concretas (especialmente de Europa).
- La variedad sencilla de alhelí (que es la que reconocerás porque tiene cuatro pétalos) es más rústica y resistente.
- Los alhelíes más comunes son los amarillos y blancos, aunque también los hay morados, rosas…
Cuidados de los alhelíes
- Esta planta requiere de tierra ligera y blanda para desarrollarse mejor, de manera que procura darle el sustrato que necesita y tendrá una floración más vistosa y profusa.
- Los alhelíes viven bien en temperaturas suaves, que no bajen de los 5 grados ni suban de los 25.
- Es buena idea que los protejas tanto del calor extremo (y de los rayos directos del sol en las horas de mayor incidencia) como de las heladas en invierno, ya que son muy sensibles al frío y podrían llegar a secarse.
- Eso sí, al alhelí le gusta el sol, así que procura tenerla a pleno sol en los momentos de menos insolación en verano y prácticamente todo el día desde el final del invierno y durante la primavera.
- Aunque la semisombra no le hace mal, es una planta a la que no le beneficia la sombra. No tengas tus alhelíes en una zona umbría.
- El alhelí es, no obstante, una planta rústica y resistente que requiere de poca agua (salvo en la primera semana después de trasplantarlo). Riégalo cuando notes el sustrato seco o que la propia planta “pide” agua y vigila que el drenaje sea el adecuado.
- ¿Qué plagas afectan a los alhelíes? Pulgones, mosca blanca (como a los geranios de pensamiento), minador y orugas. Los alhelíes también pueden padecer infecciones por hongos.
- Abona tus alhelíes durante la temporada de floración, para que dispongan de los nutrientes necesarios para desarrollar flores abundantes y vigorosas.
- Retira las hojas y ramas marchitas o dañadas, para que no afecten al desarrollo del resto de la planta.
Curiosidades sobre los alhelíes
- Los alhelíes, como casi todas las flores, tienen infinidad de nombres comunes, dependiendo de la zona en la que crezcan. Así, también se les llama marisalados, jazmín azul, jazmín cenicero, viola blanca o violeta purpúrea.
- El alhelí es muy apreciado como planta y flor ornamental, pero también medicinal. Sus hojas y el aceite que se obtiene de la planta se utilizan en infusión contra el dolor de cabeza o como tónico para la piel.
- También se usan las flores de alhelí para baños aromáticos, de los que se cree tienen propiedades relajantes y reconfortantes.
- La planta de alhelí pertenece a la familia de las crucíferas. Se llaman así porque la mayor parte de las plantas de esta familia tienen forma de cruz.
- En cuanto a los significados del alhelí en el lenguaje de las flores, van ligados al color. Los amarillos evocan fidelidad ante los tiempos difíciles, de ahí que sea una flor para regalar a la pareja como forma de afianzar el compromiso.
- Los alhelíes blancos simbolizan modestia y la pureza, así como generosidad sin interés; el alhelí púrpura lleva en sus pétalos un color regio que transmite la belleza.
- La palabra alhelí proviene del árabe que se hablaba en la península ibérica (al-ahyri) y este vocablo viene del persa hirí; evoca el exhuberante aroma de la planta.
- Los alhelíes han sido siempre muy populares en el mundo del arte. Tanto es así que cuentan con poemas como los de Lorca o Alberti y tienen incluso una canción: la famosa Capullito de alhelí, compuesta por el cubano Rafael Hernández en los años cincuenta.
Ahora que ya sabes un poco más sobre los cuidados de los alhelíes, utilizalos para decorar o para regalar a tus seres queridos.